por Eliseo Sequeira, desde Montevideo

Un artículo publicado el El País de Montevideo bajo el título "No hacer cambio de hora es "retroceso en eficiencia energética", indica en su copete que un informe elaborado por la consultora energética SEG Ingeniería señaló como "un paso atrás" la no aplicación este año luego de 11 años del cambio de horario que comenzaba a regir cada primer domingo de octubre. "La no implementación de esta medida constituye un retroceso en el avance de la eficiencia energética en el Uruguay", sostuvo SEG.

Cabe señalar que este Portal había dado la primicia que Uruguay no adelantaría la hora en el verano, y la decisión fue tomada por el mismísimo Presidente de la República luego de una reunión con representantes de las gremiales del turismo.

El artículo abunda en detalles de las razones del pretendido ahorro para la UTE y sus clientes, así como el país. Y los datos comprenden la totalidad de los clientes de la UTE, más sus costos de generación de electricidad.

Del lado de enfrente, las gremiales turísticas manejaron estimaciones, pero sin un fundamento que resista el más mínimo análisis numérico. No hay mediciones objetivas, y frente a los datos concretos, ni siquiera los datos estadísticos que recoge el Ministerio de Turismo servirían para contrarrestar la contundencia de la información manejada por SEG.

Por ello, para la próxima temporada, va a ser crucial nuestra postura de "Llegando al límite: medir y gestionar ... o cerrar". O se mide y se procesa adecuadamente los efectos económicos del no cambio de hora en el sector turístico y su derrama, o se exponen a que sólo se vuelvan a presentar las posibles pérdidas económicas de la UTE y sus clientes. Si no se mide y procesa, nadie asegura que el próximo año no se revea la medida y la hora se vuelva a adelantar en octubre.

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