La historia empieza cuando la compañía de los Emiratos Árabes Unidos pretende llegar al único país de más de 100 millones de habitantes al que aun no vuela: México, en la parte meridional de América del Norte. La altura a la que está situado el aeropuerto Benito Juárez de la capital, más de 2.238 metros de altura, impide que Emirates pueda realizar la ruta directamente desde su país, con lo que se ve obligada a elegir un punto de escala central para poder repostar, realizar un cambio de tripulación y poder, en lo posible, llenar el avión con pasajeros que puedan tomar el avión en esa escala.
La ciudad elegida es Barcelona, donde Emirates está operando con muy buenos resultados dos veces al día desde Dubai, realizando ambos vuelos con los enormes Airbus A380 que llevan ocupaciones medias notables y van prácticamente llenos durante los meses de temporada alta en España, pues desde el hub de los emiratos, el grueso de los pasajeros siguen viaje a un buen numero de destinos del mundo.
En este caso, las intenciones de la compañía presidida por Sir Tim Clark van en dirección contraria: se quiere que los pasajeros asiáticos y delos países del golfo puedan llegar a México pasando por Barcelona, donde el avión recogerá a nuevos pasajeros y continuará su viaje. El trabajo es intenso, los estudios pormenorizados y finalmente, uno de los obstáculos más difíciles se consigue: el gobierno de España da luz verde a la operación, que en principio no sería posible, puesto que Emirates no es ni aerolínea española ni europea y tiene que justificar la especial importancia y necesidad del vuelo para solicitar la quinta libertad aérea a España, una medida excepcional que permitiría que entrase en un mercado nuevo que hasta ese momento tenía cerrado.
A mediados de marzo, el número dos del Ministro de Fomento, el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez-Pomar, realizó una visita oficial a los EAU y una de sus reuniones fue con el vicepresidente de Emirates, Salem Obaidalla, encuentro que se saldó con la autorización para que Emirates pudiera pasar por Barcelona para realizar la escala técnica y comercial en su ruta a Ciudad de México, lo que implicaba una tercera frecuencia diaria Dubai-El Prat y la posibilidad de comercializar el tramo Catalunya-México y viceversa.
El Ministerio de Fomento lanzó el comunicado con gran rapidez, sorprendiendo incluso a la compañía aérea. El mismo comunicado llegó también a la sede de Aeromexico que tenia dormidas desde hace años sus intenciones de regresar a Barcelona, ruta que abandonó en 2012.
De repente, en la sede de la aerolínea mexicana, privatizada hace 20 años y cuyo accionista mayoritario es la estadounidense Delta Airlines, todo se precipitó: la capital catalana volvía a ser interesante y se anunció el regreso con una rapidez similar a la del comunicado del Ministerio de Fomento.
Todo fue tan veloz que incuso se abrieron a la venta los billetes para agencias y por internet hace tres semanas para los vuelos AM33 y AM34 directos entre Barcelona y Ciudad de México con una duración de 11 horas o casi 13 dependiendo del sentido del viaje (siempre son más largos los viajes hacia el oeste)
Paralelamente, Aeromexico presionó a su gobierno para que no cediese la quinta libertad a Emirates y de hecho, como indicó Darío Flota, director del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo en una comparecencia publica, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, equivalente al Ministerio de Fomento, no había dado luz verde al proyecto de Emirates negándole la quinta libertad, dando preferencia y exclusividad a Aeromexico en su regreso a Barcelona. Aunque esto no iba a acabar allí.
Pocos días despúes, la encargada de negocios del Consulado de México en Barcelona indicaba a La Vanguardia en nombre de la Embajadora, actualmente ejerciendo el cargo de Consul General, que no estaba cerrada la posibilidad de que Emirates volase su país y que las opciones seguían abiertas, aunque aun sin nada concreto. Al mismo tiempo, desde Emirates se mantenía el mismo perfil bajo de las ultimas semanas: no se daba ninguna comunicación oficial sobre nuevas operaciones a El Prat y México y se estaba a la espera de futuros acontecimientos.
Este miércoles se produjo un nuevo giro de guión en esta historia: Aeromexico suspendió la venta de billetes tras tres semanas de comercialización y emitió un comunicado en el que se indica que suspende “de manera indefinida” sus planes de abrir una ruta entre la Ciudad de México y Barcelona tras serles otorgadas las quintas libertades a una aerolínea de los Emiratos Árabes Unidos que le permitirán ofrecer vuelos entre México y España.
Curiosamente en el comunicado no se menciona a la aerolínea competidora, de la que se indica que “goza de subsidios y facilidades por parte de su gobierno que constituyen una competencia inequitativa frente al resto de las aerolíneas en la industria” para rematar con que la situación supone “competencia desleal y subsidiada, lo cual, se traduciría en pérdida de empleos mexicanos y en el debilitamiento de la conectividad del país” para dedicar a su gobierno las ultimas lineas diciendo que “lamenta esta acción y replanteará sus planes de expansión a otros mercados donde se privilegie la sana competencia entre las líneas aéreas”.
Todo un culebrón aeronáutico mexicano-dubaití y con epicentro en Barcelona; un aeropuerto que, de momento, sigue sin tener fecha definida para recuperar los vuelos directos a la capital de México. Desde ayer en la web de Aeromexico vuelven a venderse exclusivamente billetes con cambio de avión en Madrid-Barajas, mientras que en Emirates aun no hay nada oficial, aunque si disponen ya de todos los permisos gubernamentales para hacerlo y ahora queda pendiente disponer de espacio en el aeropuerto Benito Juárez, que desde 2012 opera prácticamente al limite de su capacidad y así lo hará hasta que en 2020 se abra el nuevo aeropuerto, diseñado por los arquitectos Norman Foster y Fernando Romero.
Ante la situación, es de esperar que en el próximo capitulo sea Emirates quien mueva pieza y confirme definitivamente intenciones, fechas y horarios para este nueva y esperada ruta que ampliará los destinos intercontinentales y la conectividad de Barcelona.
Portal de América - Fuente: La Vanguardia