Por la información que hemos recopilado hasta el presente, de las 4 bebidas, dos eran de medio litro y dos de a litro, las pizetas eran más grandes que las estándar y daban para 4 personas cada una. Los consumidores fueron 8, y si pagaron la consumición (cuyos precios están a la vista antes de ordenar), suponemos quedaron satisfechos.
En ese mismo sentido se pronunció el alcalde de Punta del Este, Andrés Jafif, a El Espectador. Y en la misma nota aclara que quienes aumentaron un 30% los alquileres de sus viviendas ante la perspectiva de una buena temporada, son propietarios argentinos.
La Ministra de Turismo, Liliam Kechichian, en declaraciones recogidas por el diario El País, dijo que a ella lo que más le molesta es que muchas veces no se respeta la relación entre calidad de servicio y el precio, y mencionó que en algunos locales de Punta del Este cobran el doble que los mismos ubicados en Montevideo. De todas maneras señaló que estos casos "son los menos".
En la misma nota, el presidente del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu), Mario Menéndez, afirmó que la Ministra "enfocó mal" el tema de los precios denunciados como excesivamente altos en ciertos comercios de Punta del Este. "Aprecio mucho a la ministra de Turismo, pero las cosas cuando suben, suben", dijo Menéndez. Y agregó que de todas maneras, "cuando uno entra a un comercio mira si los precios le sirven o no".
El lunes, en "La relatividad de los precios en Punta del Este", señalábamos que "...cada quien está libre de cobrar lo que quiera en Punta del Este y asumir los eventuales riesgos y posibles beneficios y NADA MÁS."
Pero antes de discutir si los precios son altos o bajos, se debería ver si los mismos cubren o no los costos de mantener un negocio abierto todo el año, pagando los impuestos, salarios costos fijos e insumos. Y más aún, para el caso de Punta del Este, discutir y resolver ¿qué Punta del Este queremos?.
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