Excesos en el tránsito y excesos en la prevención
Lunes, 20 Agosto 2012 11:24
Que el tránsito en Uruguay, principalmente en Montevideo ha cambiado y para mal, no es novedad. Hasta hace poco la rush hour era cuestión de Miami, San Pablo, Buenos Aires, Santiago o el DF azteca pero por aquí, calma chicha. Más automóviles, muchísimos más han contribuido a dar paso a complicados embotellamientos a los que no estábamos acostumbrados. Para darle solución a los mismos (unificar el sentido en determinadas horas en determinadas vías)hay gran pereza, la que no existe para legislar sobre la ingesta de alcohol y se avanza hacia el cero gramo por litro de sangre y de yapa, se incluye el psicotécnico, también en la RENOVACIÓN de la licencia.
por Sergio Antonio Herrera, @DelPDA en Twitter
Todo lo que sirva para ordenar el tránsito, preservar la vida de los conductores y fundamentalmente la de terceros, debe ser bienvenido sin ningún tipo de observación y mucho menos de censura.
Peeeeeeero, siempre hay uno.
Creemos que hay un detalle muy importante a tener en cuenta que se está obviando y ese es nuestro matiz determinante con esta movida preventiva.
Nos referimos a un contundente dato de la realidad: la performance del individuo que se presenta a renovar. No debe haber prueba más contundente y psicotécnico más eficaz que el comportamiento de un individuo en la más pura realidad del manejo diario a lo largo de su vida.
Por ejemplo en mi caso, camino a las cuatro décadas de conductor sin haber protagonizado accidentes. Es lógico que se me examine la audición y la visión y que esos dos resultados sean los que evalúen prioritariamente mi aptitud para seguir manejando o no, pero desde ya, me parece excesivo que se le dé el mismo valor a otro tipo de pruebas como un psicotécnico, lo cual con su sola mención, ya me pone mal, por ignorancia claro, nunca me sometí a uno.
Del mismo modo que el pomposo cero grado de alcohol por litro de sangre.
Todos sabemos, que haber ingerido una cerveza o dos whiskies o medio litro de vino, no emborrachan ni enturbian el manejo de la inmensa mayoría de los conductores.
Todos estamos bajo libertad condicional en todos los aspectos. Se está yendo sin anestesia hacia los límites en casi todo, hasta por allí escuchamos que los humoristas corren riesgos de ser denunciados por discriminación si hacen chistes de gays, de judíos, de gallegos...
De manera que ¡ojo! a los que se dirijan a mi diciéndome "Negro" y por más que antepongan el "Señor", como preciso efectivo tal vez los denuncie por discriminarme, el que avisa no traiciona, je je.
Nota: Como se puede apreciar (y antes que aparezca algún abogado del diablo, enviando comentarios), empecé en serio el artículo y lo terminé matizando con humor. Pero lo dicho en serio, se mantiene hasta antes del párrafo final donde desbarranco, pero me gustó para dejarlo así.
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