por Gabrielle Lámy

En primer lugar, el presidente electo francés anunció en varias ocasiones que quiere crear un órgano que comprenda a todos los actores del Turismo, tanto privado, público y del turismo vacacional y de negocios, a fin de lograr una mejor coordinación de todos los operadores y empleados.

“Se harán esfuerzos para que el 46 por ciento de los franceses que no van de vacaciones se pueda hacer con cheques de vacaciones y que se les proporcione más viviendas disponibles”, llegó a concretar el político durante su campaña.

La segunda prioridad de Hollande para el sector turístico es reforzar el atractivo de Francia en los mercados internacionales y el fortalecimiento de franceses, acentuando las peculiaridades turísticas de Francia. Puede deducirse que se trata de una apuesta por la promoción.

Por tercer y último lugar, Francois Hollande, considera que para conseguir un alto nivel de excelencia en el sector la clave es la inversión en formación. De acuerdo con el presidente electo francés, el apoyo al sector turístico es importante ya que sirve a la influencia de Francia en el mundo.

Francia ocupó en 2010 el tercer lugar en cuanto a ingresos por turismo. Recabó a través de esta industria 46,6 mil millones de dólares, frente a los 103,5 mil millones de Estados Unidos, y los 52,5 mil millones de España. China ostentó el cuarto lugar con 45,8 mil millones de ingresos para esta industria.

“El reto de los próximos cinco años es que Francia sigue siendo el líder mundial en el sector turístico. Para ello es necesario dar un nuevo impulso a la intervención pública, en coordinación con todos los operadores turísticos. El turismo será un motor de crecimiento y creación de empleo para nuestro país “, dijo Francois Hollande, el 5 de abril.

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