por Sergio Bañales, desde Montevideo

Digo esto, porque nuestro Presidente, cada vez más demuestra mediante su calidad seductora y sus expresiones criollas, inteligencia y excelente capacidad de absorción y manejo de temas, como ser el del turismo, actividad que antes ni siquiera consideraba.
 
No hay dudas que es una persona que supo aprender y revertir sus conceptos en el momento apropiado y justamente demostrar sus buenas dotes de "dribleador" ante la gente que debía sentir tranquilidad, como lo hizo en aquella visita a Punta del Este ante empresarios de los diferentes rubros turísticos.

Su recorrida por el Conrad, sirvió para enriquecerlo de información y debido a su condición de “open minded”, como dicen en inglés para catalogar a un “mente abierta” o a un visionario, le permitió asimilar ¿de qué se trataba esta actividad (erróneamente llamada, “industria sin chimeneas”)?. Pero justamente el sentido figurativo de esta denominación, le permitió realizar un importante y recordado comentario en Enero del 2009 expresando: “este Hotel es una de las principales fabricas del país”, refiriéndose a este complejo con sus mas de 2000 funcionarios.
 
Estratégicamente en el mismo lugar, también celebró el famoso almuerzo con empresarios, en Febrero del 2010 manifestándose y demostrando definitivamente su convencimiento sobre la relevancia del Turismo no sólo en la economía nacional sino también por su efecto social y su rol exportador.

Convengamos que no por casualidad en casi todos sus discursos el Presidente Mujica invita a los inversores no sólo a confiar en Uruguay, sino que también los invita a vivir en nuestro país como cuando hace unos días en su discurso en Santiago de Chile les pidió a los uruguayos allí residentes que regresaran a su patria, “que allí nadie les mueve el piso”, (aludiendo a los hechos catastróficos recientes, de sismos en ese país).

Nuevamente (y seguro que no estaba en el repertorio), de forma magistral el Pepe con su característico estilo, envía un mensaje directo y clave con un dejo jocoso, rematando el discurso diciendo que Uruguay “más que natural, es un país macanudo”, reafirmando ante los presentes ese concepto que se tiene de país amigable.
 
Sus objetivos respecto al crecimiento del Uruguay tienen varias vertientes y sin duda está entre ellos el crecimiento de la población desde afuera y no lo centra en una búsqueda masiva, ni tampoco yendo a buscar candidatos muy lejos, sino de forma bastante selectiva, sencilla y económica, buscando y seduciendo a los que ya son de acá y a otros que geográficamente están bien cerca.

También es evidente su fijación de conquista hacia nuestros hermanos del Plata con mensajes en materia turística como “los argentinos son el alma del cuadro” y en otra ocasión cuando se le adjudicaba una amistad con los Kirchner se eleva en el aire y con un cabezazo hábil y certero declara, “yo soy amigo de la Argentina”.
 
Más allá de partidarismos y de subjetivas simpatías quienes somos hombres del turismo y profesamos en lo que hacemos, debemos creer en Mujica,  porque es un buen hombre, inteligente, estratega y junto a su esposa Lucía, arman un interesante equipo de meditación.

No lo duden un minuto que ya se preparó el terreno y se apronta para venderles el Uruguay a  los duros “piqueteros” que por algo aceptaron conversar con él incondicionalmente, cosa que yo por lo menos interpreto como “buenas perspectivas para los Viajes y el Turismo”.

Venda Pepe…Venda!

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