por Eliseo Sequeira, desde Montevideo, Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

La noticia no es un dato menor, pues se trata de uno de los 10 países más vacunados en el mundo (eso sin considerar países y territorios pequeños), 67% con una dosis y 50% con las dos. Pero a pesar de ello, cuando a mediados de mayo, con menos de 700 casos activos por millón de habitantes (ca/mh) y una reducción de las muertes casi a cero, pensaban que tenían controlado a la enfermedad, los casos se dispararon y a la fecha está con casi 9.000 ca/mh. Aunque parezca contradictoria la decisión, no lo es, está tomada con la base de que la vacunación está siendo efectiva, pues los ingresos a cuidados intensivos y las muertes no han seguido la misma tendencia, es más, se han mantenido bajas afectando principalmente a los no vacunados.

La pandemia desnudó lo mejor y lo peor de los seres humanos, la hemos analizado en números y hechos, pero es hora de mirar hacia adelante, sin olvidar la experiencia, pero sin cerrarnos a la creencia suicida de que volveremos a una situación siquiera parecida a la pre-pandemia. El uso de mascarillas faciales y alcohol en gel, así como el incremento de la limpieza de manos y superficies, conviene que  permanezca en el tiempo, principalmente en lugares cerrados, así como en lugares abiertos con intensa circulación (distancia entre personas menor a un metro). Recordemos que las nuevas cepas que se van descubriendo cada vez son más agresivas, lo que significa que requieren menor carga viral y tiempo de contacto para un contagio efectivo.

Para mirar hacia adelante, nos centraremos en escenarios, teniendo en cuenta que todo el mundo ha actuado y sigue actuando en un proceso de acierto-error. Hasta el cansancio se ha visto que una misma medida, sea en el mismo o diferente país, ha tenido resultados distintos según el momento en que ha sido aplicada. Y pedimos a los "pronosticadores seriales" sean políticos o periodistas, que dejen de desarrollar escenarios contrafácticos con los ojos en la nuca y tomando el segmento de la película que más les conviene a sus intereses, y que comiencen a aportar en la construcción de la nueva realidad.

Uruguay  

Es uno de los 10 países que más ha vacunado en el mundo, donde el 66% de la población ya tiene por lo menos una dosis y el 54% las dos. Las autoridades tienen previsto pasar el 70% de vacunados a fines de julio. Hace 30 días tenía 8 departamentos con bandera negra (Indice de Harvard superior a 68), 7 con bandera marrón (IH entre 50 y 68), 3  con bandera roja (IH entre 25 y 50) y sólo 1 con bandera naranja (IH entre 10 y 25). Este sábado sólo quedaban 2 con bandera roja, 12 con bandera naranja y 5 con bandera amarilla (IH enttre 1 y 10). En 6 semanas, el promedio semanal de nuevos casos se redujo en un 84%, y el de muertes un 70%. Este domingo está con 2.038 ca/mh, lo que lo coloca tercero en sudamérica en el ranking con menos casos. El primer lugar actualmente lo ocupa Ecuador, con 774 ca/mh, y el segundo Chile, con 1.002 ca/mh.

Entre la semana pasada y la que se inicia, hay numerosas actividades como la educación, la cultura (teatros y otros espectáculos) y las fiestas, que progresivamente vuelven a activarse, protocolos mediante.

Pero en lo referente al turismo receptivo aún no hay perspectivas. Ni siquiera hay rumores de alguna "prueba" como la que se hiciera hace días para la reapertura de los espectáculos. Posibilidades sobran, pero aparentemente se está prisionero del "relato políticamente correcto".

Reiteramos  la propuesta realizada en "La vuelta del turismo y los viajes internacionales será lenta y difícil":  "...la reapertura deberá ser muy progresiva, y lo que es más, muy selectiva. La misma recién podría ocurrir siempre que la reducción de casos y muertes siga al ritmo actual, y se llegue al punto que se pueda controlar el hilo epidemiológico de los nuevos infectados y lograr la trazabilidad de los extranjeros que ingresen al país." "Lo más "fácil" y que seguramente está en la mente de todos, serían los requisitos para los vacunados, cualquiera sea su nacionalidad, sólo basta con reproducir los actualmente vigentes para residentes, sean nacionales o nacionalizados, que vuelven al país. Al principio sería necesaria una cuotificación de esos ingresos. Una "prueba piloto" segura, similar a la del "pase verde" que se hizo para el sector espectáculos días pasados, puede ser acceder al planteamiento de los funcionarios del Enjoy Punta del Este, dejar ingresar semanalmente un grupo de unas 120 personas, vacunados e hisopados, a la "burbuja" de ese establecimiento.

La segunda idea responde a un hecho que no podemos soslayar, que hay muchos argentinos y brasileños que aún no están vacunados (especialmente los primeros), pero que tienen propiedades en el Uruguay a las que hace más de un año no tienen acceso. Han inveretido en el país, pagan impuestos por sus propiedades, las ocupen o no, y cuando pueden venir, consumen localmente. No es turismo interno, es de cercanía. Para ellos proponemos que con más razón se establezca un cupo, pero que se les incluya la posibilidad de vacunarse en Uruguay, lo que los pondría en pie de igualdad con los que sacaron ciudadanía. Ingresarían con PCR negativo, y el puesto de vacunación estaría ubicado en el punto de ingreso, sea terrestre o fluvial (imperativo dar las dos opciones). La decisión de cobrar la vacuna o no es del gobierno."

Otros países

La situación en Latinoamérica es disímil, aunque prevalecen los altos números de casos activos por millón de habitantes y los muy bajos niveles de vacunación. Ello significa que un viaje a la mayoría de esos destinos representa un riesgo para la salud, porque la vacuna proteje en la medida que la carga viral en la población no sea alta.

En el caso de Europa y algunos países del Medio Oriente, también la situación es disímil, aunque como los niveles de vacunación son mucho mayores, es probable que la evolución en el corto plazo sea un poco más favorable.

Pero la tendencia probablemente será ir abriendo las fronteras de a poco y con estrictos protocolos: vacunados o recuperados, más entre uno y tres tests  de control, y en caso de positivos, cuarentena estricta a su costo, y hasta alguna penalidad si no se cumple con la cuarentena o el protocolo. En todos los casos en que se flexibilizaron (o se ignoraron) los requisitos, la enfermedad recrudeció. Esta mecánica desestimulará los viajes transfronterizos, agudizando así la crisis económica del turismo receptivo...en todo el mundo. La creatividad en los mecanismos de ingreso y en la presentación de ofertas sustentables, incluída la conectividad, serán claves en la competitividad entre destinos, probablemente por un largo tiempo. 

Los niveles de cierre de fronteras y condiciones de ingreso y de excepciones varían continuamente. Si de cualquier forma se va a viajar, las condiciones del momento es mejor consultarla a un agente de viajes con conocimiento del destino seleccionado.

Tomando en cuenta el nivel de ca/mh de Uruguay, nos atrevemos a clasificar los países a los que le hemos realizado seguimiento en cuatro niveles de riesgo.
- Nivel bajo - Menos de 1.000 ca/mh. Alemania, Canadá, Ecuador, El Salvador, Francia,  Italia, Israel, Qatar y Turquía.
- Nivel medio - Entre 1.000 y 3.000 ca/mh. Chile, Grecia, Guatemala y México.
- Nivel alto - Entre 3.000 y 6.000 ca/mh. Bolivia, Brasil, Colombia, España, Panamá, Paraguay, Portugal y República Dominicana.
- Nivel muy alto - Más de 6.000 ca/mh. Argentina, Costa Rica, EE.UU. y Reino Unido.

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