La compañía informó que su pérdida neta fue de 645 millones de dólares, cifra menor a los 708 millones del primer trimestre y 991 millones del cuarto trimestre del 2016, detalló la agencia Reuters.
La continua reducción de las pérdidas muestra los esfuerzos de Uber por controlar el enorme gasto en subsidiar tasas tanto para conductores como para clientes, así como para, en otras tácticas de competencia, pelear con rivales en mercados duros como el sur de Asia.
El año pasado, Uber perdió alrededor de 3,000 millones de dólares. Como compañía privada, no tiene obligación de informar públicamente sus resultados, pero inició esa práctica este año con la mira puesta en una salida a bolsa en el futuro cercano.
La tasa de crecimiento sugiere que el negocio de Uber se ha mantenido pese a una reciente serie de escándalos, pero la empresa todavía está perdiendo importantes sumas de dinero y sus ejecutivos se han negado a fijar una fecha en la que podría ser rentable.
Algunos inversores han observado la valuación de Uber en 68,000 millones de dólares con escepticismo, y recientemente cuatro fondos mutuales de inversión rebajaron el valor de sus acciones hasta un 15%.
La compañía dijo que sus reservas brutas de viajes en el segundo trimestre alcanzaron los 8,700 millones de dólares, en comparación con los 7,500 millones en el periodo previo.
Aunado a esto, la cantidad de viajes globales en la aplicación se incrementó un 150% respecto al año anterior, con un crecimiento mayor en mercados emergentes.
Portal de América - Fuente: Forbes