Sin embargo, aparentemente no entendieron las indicaciones y prosiguieron hasta alinearse en la pista. Ante la posibilidad que iniciara el despegue sin autorización, para evitar una posible colisión el controlador hizo que el Cessna 208 matrícula uruguaya CX-MAX que estaba en el descenso final, arremetiese y tomara altura nuevamente.
Tras la aclaración del controlador a la aeronave de Gol del error que habían cometido, a lo que respondieron con una disculpa, fue autorizado el despegue del Boeing, y el Cessna pudo aterrizar con seguridad.
Portal de América - en base a cobertura de un spotter del blog @AvionesenEzeiza