Esto supone que viajar a Estados Unidos bajo el Programa de Exención de Visa será más caro —y, por tanto, menos atractivo— para los ciudadanos de 42 países. No obstante, todavía no se ha fijado una fecha para la entrada en vigor para este nuevo sistema de tarifas.
Esto se suma al importante recorte presupuestario aprobado por el Gobierno estadounidense para la Marca USA, así como en los miles de millones de dólares invertidos en infraestructura de movilidad, o la prohibición de entrada a los ciudadanos de numerosos países.
“Aumentar las tarifas para los visitantes internacionales legítimos equivale a un impuesto autoimpuesto a una de las mayores importaciones de nuestro país: el gasto en viajes internacionales”, ha criticado Geoff Freeman, presidente de la Asociación de Viajes de Estados Unidos.
“Estas tasas no se reinvierten en mejorar la experiencia de viaje y solo disuaden a los viajeros extranjeros de visitar el país, a pesar de que ya tienen preocupaciones sobre la hospitalidad y los altos precios”, ha continuado Freeman en declaraciones recogidas por FVW.
Freeman exige al Gobierno estadounidense que se comprometa a “eliminar por completo o, al menos, reducir al máximo” las tasas a los visitantes y que la Marca USA reciba la financiación adecuada. Desde el punto de vista del presidente de la asociación, solo así, Estados Unidos podrá beneficiarse de los próximos eventos deportivos como la Copa Mundial de la FIFA o los Juegos Olímpicos de 2028.
Portal de América - Fuente: Tourinews