Por lo tanto, no hay cola alguna.

Pero este artículo no lo escribimos para desacreditar a Monzeglio y mucho menos para polemizar con él. En todo caso el Subsecretario, que integró como él mismo recuerda, una comisión de reconectividad aérea, como buen político aprovechó que Iberia, Air Europa, Copa Airlines, Latam y Amaszonas hubiesen expresado su voluntad de retomar frecuencias para presentar la novedad como algo inusual, emparentándolo con el éxito del encare sanitario de la emergencia. En definitiva, estamos habituados a aquello de llevar agua para los respectivos molinos, hasta ahí, podemos decir que no es una situación para elogiar pero tampoco es nada grave ni tan criticable.

¿Entonces?

Lo realmente preocupante es que la conectividad aérea, como venimos diciendo desde hace tiempo, es a todas luces insuficiente. Lo era antes del 13 de marzo y cuando entremos en la Nueva normalidad, lo va a ser aún más. No hay nuevos operadores, no hay nuevos mercados emisores, habrá menos vuelos. Juramos que deseamos equivocarnos, disfrutaríamos tener que excusarnos si la realidad es otra.

Por lo tanto, y aquí va nuestra real advertencia, nuestro llamado a la cordura, no solamente a nuestras autoridades, sino a los amigos del campeón. Esos señores que tienen una posición bien definida en lo político, que ven en cada acción del nuevo gobierno, poco menos que genialidades.

En el post de referencia en Facebook, leímos comentarios como estos: "Gran gestión"; "Nos alegra ver que de a poco la conexión aérea va aumentando"; "Excelente noticias, muchas gracias por la gestión"; "Excelentes noticias".

Y atención, los comentaristas no son de ninguna manera ajenos a la actividad, lo cual es más preocupante.

En conectividad aérea antes del 13 de marzo estábamos muy mal; todo parece indicar que vamos a estar peor en lo inmediato.

No hagamos olas, no hagamos lo que criticamos durante los tres lustros anteriores.

Portal de América