por Sergio Antonio Herrera, desde Málaga, Costa del Sol

Se notaba el final de la temporada “alta” pero aún así, el lugar muestra un movimiento y un estilo propio que lo hace diferente, distinto.

En el contenido audiovisual mostramos que pasamos por varias situaciones divertidas que le dan un plus a las vacaciones.

El viernes 2, recorrimos los más de seis kilómetros de la Milla Dorada viendo hoteles “de aquellos” y boliches para estar con antelación en el Parque de la Alameda, junto a la fuente de la Virgen del Rocío, punto de encuentro que nos marcó Civitatis para el City Tour de Marbella. Llegada la hora no apareció nadie y ya vimos que algo raro ocurría.

Llamamos reiteradamente a Tours in Málaga, el proveedor local de la operadora cuyos servicios usamos regularmente en Europa y nadie nos atendió, tampoco nos respondieron los mensajes de audio. Molestos y desconcertados fuimos a la Oficina de Turismo local donde se nos respondió: “no tenemos nada que ver, es un asunto de privados, vaya a la policía si quiere…”

Apelamos como es costumbre a los buenos oficios de “nuestra productora personal”, Yoselin, quien siempre anda con sus apuntes, sus mapas y pudimos de alguna manera armar el recorrido que compartimos.

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