Según expone, la primera “tiene un problema” respecto a la segunda. “En Airbnb hay establecimientos regulados y legales, pero hay otros que no lo están. Es un punto que les acabará afectando por las regulaciones de cada país, como ya se ha visto en Portugal, que harán que pierda cuota de mercado. Su modelo va a cambiar muchísimo ahí”, señala.

Requena explica que “en Booking tú tienes que mandar licencias, incluso visitan tu establecimiento para cerciorarse de que lo que dices que tienes es real”. “Hasta donde yo sé, es algo que no existe en Airbnb”, prosigue.

A su juicio, “Booking tiene de todo y, para mí, está a años luz por delante”. “No me extrañaría que incluso compraran Airbnb, porque su segmento de mercado son apartamentos que ya saben que son legales”, indica.

Preguntado por la relación entre Booking y los hoteleros, el empresario aclara que “no es el enemigo, es un coste comercial: mucha gente me conoce gracias a que estoy ahí”. No obstante, reconoce que “todo lo que consiga vender de forma directa ahorra la comisión pertinente, y es algo que incentivamos con captación de clientes, clubes de fidelizaciones, campañas en redes sociales”.

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