por Ramón de Isequilla, desde Madrid

Así lo reflejaron los medios:

Título de La Razón: “El Gobierno “reflexionará" sobre el derribo de la Cruz del Valle de los Caídos. La nueva Ley de Memoria Democrática “resignificará” el enclave, lo reconvertirá en un cementerio civil y expulsará a los Benedictinos”

Título de OK Diario: “NUEVA LEY DE MEMORIA HISTÓRICA El Gobierno expulsará a los benedictinos del Valle de los Caídos y no descarta derribar la cruz. Calvo afirma que se abrirá un período de reflexión sobre el destino del símbolo más reconocible del conjunto monumental”.

Título de Libertad Digital: “El Gobierno expulsará a los benedictinos del Valle de los Caídos y "reflexionará" sobre el derribo de la Cruz”.

Título de la Vanguardia: “El futuro de la cruz, pendiente de la resignificación del Valle de los Caídos”.

Nos hemos referido en otras oportunidades a la trascendencia del “Turismo Religioso” en los recursos turísticos de España, comenzando por el “Camino de Santiago”, la “Catedral de Santiago de Compostela” (lugar Santo de la Cristiandad junto a Roma y Jerusalén, Liébana y Caravaca de la Cruz), la “Catedral de Burgos”, la “Catedral de León”, “La Catedral Mezquita de Córdoba”, la “Catedral de Barcelona”, la “Catedral de Toledo”, la “Catedral de Segovia”, la “Catedral de Palma de Mallorca”, la “Catedral de Zaragoza”, la “Catedral de la Almudena”, la “Catedral de Sevilla”, la “Catedral de Valencia”, etc, etc.

No nos podemos imaginar ninguna visita turística a las más importantes ciudades de España, sin incluir un monumento religioso, asimismo, ignorar el rol de la Iglesia Católica en España, despreciar el sentimiento del 75% de los españoles e ignorar lo que ha sido España para la defensa de la Fe Católica es realmente absurdo.

Una de las excursiones regulares más importantes y concurrida en Madrid es según los operadores receptivos y transportistas turísticos, la del “Real Monasterio de El Escorial y Basílica del Valle de los Caídos”.

La Basílica del Valle de los Caídos, lamentablemente está cargada implicancias políticas, que enturbian su realidad de Abadía Benedictina y su imponente Cruz de 150 metros de alto que es uno de los símbolos turísticos de España. Otra oportunidad para repetir nuestra frase favorita “cuando entra la política por la puerta, el turismo se va por la ventana”.

No es para nada nuestra intención juzgar el contenido de un proyecto de ley, pero la sola mención de que el gobierno está “reflexionando” sobre “tirar abajo la Cruz del Valle de los Caídos” nos causa estupor.

Como Católicos, no podemos concebir que un gobierno de la Unión Europea tire abajo nuestro símbolo más Sagrado, esta actitud sólo se puede esperar de terroristas islámicos, actitud que nos trae el recuerdo de la quema de los Conventos en mayo de 1931 no bien iniciada la II República, a la cual hoy algunos quieren volver y como hombres del turismo nos descoloca, que se destruya cualquier elemento patrimonial que tenga la trascendencia turística como la Cruz del Valle de los Caídos.
Como periodistas turísticos nos queda denunciar el desatino y como Católicos Rezar.

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