El A220-500 ofrece varias ventajas: la principal será la capacidad de operar un avión con características similares al A320 pero con una mejor eficiencia de consumo y menos ruido. Esto proporcionaría a los operadores mejores opciones para operar rutas de corta/media distancia, ya que con menores costos podrían obtener un mejor resultado por kilómetro/asiento.
Además, la transición al A220-500 permitiría estandarizar la flota de pasillo único de baja densidad con un avión de nuevo diseño y materiales avanzados.
Según lo reportado por Bloomberg, varias aerolíneas están solicitando información adicional para considerar una versión extendida del A220. Este modelo permitiría acomodar hasta 170 asientos, superponiéndose con la capacidad promedio del A320 de dos clases.
JetBlue estaría interesada en adquirir un A220-500
La flota de una aerolínea podría estar compuesta por el A220-100 /-300 /-500, con capacidades de entre 100 y 170-180 asientos, antes de migrar al A321neo en el segmento de pasillo único. Esta consistencia en la oferta de narrowbodies es algo que el catálogo de Boeing hoy no tiene, ya que tras la caída del acuerdo con Embraer no puede ofrecer al E2 y por tanto carece de un avión con 150 asientos o menos, ni pudo certificar los 737 MAX -7 y -10. Esta falta de homogeneidad complica sus planes, tanto presentes como futuros.
El A220 más grande, viejo anhelo de Airbus
En 2019, Guillaume Faury, CEO de Airbus, habló sobre la necesidad de extender el avión A220 a un modelo más grande. Cuando el fabricante europeo adquirió el programa CSeries, lo hizo pensando en las variantes que tenía, y también en las mejoras competitivas que podía generar a través de Performance Improvement Packages (PIP) y del nuevo -500.
La creación de un A220-500, liberaría las líneas de producción de la familia A320 para concentrarlas en el A321neo, y más específicamente en las versiones LR/XLR, permitiéndole monopolizar la oferta de aviones de pasillo único de nueva generación.
Boeing y su laberinto
Boeing necesita comenzar a pensar en el reemplazo directo del 737 MAX, pero con las acciones de Airbus, las perspectivas de conseguir un producto con buena aceptación y timing correcto son cada vez menores. Aunque algunos analistas consideran que la incorporación del A220-500 podría ser perjudicial para el A320, el plan de Airbus parece ser precisamente ese: retirar el A320 para priorizar la producción -y las entregas- del A321neo.
Las opciones están sobre la mesa y quizás el próximo París Air Show sea el lugar donde Airbus presente el A220-500. La entrada en servicio podría ser rápida, ya que es una modificación de un avión existente y Airbus tiene capacidad tecnológica y mucha experiencia en la modificación incremental de los modelos que ya ha diseñado o construido.
Portal de América - Fuente: Aviación on line